Santo Domingo, RD.- La Escuela de Derecho de esta Pontificia Universidad Católica Madre y Maestra (PUCMM) fue la anfitriona de la cuarta edición de la Cátedra Juan Pablo Duarte: Democracia Constitucional, que realiza el Tribunal Constitucional (TC). Esta edición tuvo como conferencista al doctor y profesor de esta academia, Flavio Darío Espinal, quien dictó la charla “La democracia constitucional en el pensamiento político-constitucional de Juan Pablo Duarte”.
La cátedra estuvo encabezada por el presidente del TC, magistrado Napoleón Estévez Lavandier, quien destacó que esta actividad sirve para enarbolar la influencia del pensamiento de Duarte en el constitucionalismo dominicano, y la definió como, “una cátedra que, entrelazando los términos ‘democracia’ y ‘Constitución’, confirma la imposibilidad de materializar los principios democráticos actuando, por acción u omisión, al margen de la Constitución”.
“Hoy día es imposible dirigir los destinos del Estado dominicano sin observar los valores supremos y los principios fundamentales consagrados en la Constitución. El Tribunal Constitucional permanece vigilante a las actuaciones de los poderes públicos para evitar que atenten contra la democracia constitucional del país”, dijo Estévez Lavandier.
Al dictar la charla, Flavio Darío Espinal, reflexionó sobre el concepto de “democracia constitucional” de Duarte, y destacó que el patricio visualizó para el Estado dominicano un tipo de régimen basado en los pilares de la democracia constitucional. “Es verdaderamente sorprendente la lucidez que mostró Duarte al organizar sus ideas, si bien no acabadas, sobre cómo pensaba que debía estructurarse el sistema político-institucional del país”, destacó Darío Espinal. También resaltó que, aunque Duarte no formuló el concepto de democracia constitucional como tal, sus planteamientos están alineados con éste como una forma de organización del régimen político.
Flavio Darío Espinal afirmó que algunas de sus ideas fundamentales están asociadas a la democracia constitucional, “pero el concepto se fue construyendo, teórica y políticamente, a través de un proceso lento y complejo en el que confluyen diferentes corrientes de pensamiento que coexisten en una tensión permanente, siempre con riesgo de que se desarticulen”.
El catedrático identificó diez pilares que sirvieron de base a la visión constitucional del padre de la patria, con los que se propuso determinar cómo sus ideas se expresaron en el proyecto de texto constitucional que redactó, pero que no se llegó a conocer ni a discutir cuando ocurrió el primer proceso constituyente de la naciente República Dominicana, en 1844.
“Lo primero a considerar es que Juan Pablo Duarte no escribió ni pretendió escribir un tratado de derecho constitucional o de filosofía política. Al redactar el Proyecto de Ley Fundamental, su propósito fue plasmar su visión de cómo debía estructurarse el Estado dominicano. Varios autores han identificado algunas de las fuentes de las cuales él se nutrió para redactar dicho texto. Emilio Rodríguez Demorizi, por ejemplo, destaca varias coincidencias del texto de Duarte con la Constitución de Cataluña de 1702. Por su parte, Frank Moya Pons pone de relieve una mayor similitud con disposiciones de la Constitución de Cádiz de 1812”, argumentó el doctor Flavio Darío Espinal.
El conferencista también afirmó que luego de analizar las ideas del proyecto de Constitución de Juan Pablo Duarte queda claro que su visión para el Estado dominicano era que existiera una democracia constitucional en la que se plasmaran las ideas fundamentales de la soberanía popular, la limitación y la división del poder, el imperio de la ley, el respeto de los derechos fundamentales de las personas, así como el sometimiento de los poderes del Estado a los mandatos constitucionales.
“En la correlación de fuerzas en esa etapa temprana de la vida republicana predominaron las fuerzas conservadoras encabezadas por Santana, quien no toleró la presencia de Duarte y sus seguidores, los trinitarios y febreristas. No obstante, queda para la eternidad el ejemplo de Juan Pablo Duarte, uno de cuyos aportes fue ese Proyecto de Ley Fundamental que plasma las ideas que él tenía para organizar el nuevo Estado dominicano, las cuales nos deben servir de inspiración y orientación”, argumentó.