Santo Domingo, RD.- La Escuela de Derecho de la Pontificia Universidad Católica Madre y Maestra (PUCMM) fue el escenario de la puesta en circulación del libro “Democracia, justicia y autogobierno de los jueces: análisis del sistema dominicano y comparado”, del doctor Robert Placencia Álvarez, una obra que examina de forma crítica y comparada el sistema de justicia dominicano.
El director de la Escuela de Derecho, doctor Héctor Alies, calificó el evento como un momento significativo para el pensamiento jurídico nacional. “Esta tarde nos convoca una obra que, más que un libro, es una reflexión profunda sobre los pilares de un sistema democrático, justo e independiente”, expresó.
El presidente del Tribunal Constitucional, magistrado Napoleón Estévez Lavandier, destacó el valor ético y académico del autor. “Robert Placencia es un libre pensador que ha dignificado la función judicial con un desempeño caracterizado por la práctica constante de la ética y la integridad”. Subrayó además que el texto, “explica la importancia de contar con instituciones firmes y confiables capaces de garantizar una estructura judicial autónoma”.
El libro, compuesto por siete capítulos, aborda temas como la legitimidad democrática del juez, la historia institucional del Poder Judicial en República Dominicana, el funcionamiento del Consejo del Poder Judicial y del Consejo Nacional de la Magistratura, así como un análisis comparado de modelos internacionales de autogobierno judicial. También incluye una investigación de campo basada en entrevistas a actores clave del sistema jurídico nacional.
“El autor resalta el deber de independencia que recae sobre los jueces de todas las instancias judiciales, quienes deben actuar dentro de los límites de sus funciones”, afirmó Estévez. Agregó que el texto “interpela, desafía y convoca al lector a reflexionar seriamente sobre los valores en los que se fundamenta nuestro sistema de justicia”.
El prólogo estuvo a cargo del jurista Eduardo Jorge Prats, quien elogió el rigor de la obra y su enfoque innovador sobre un tema poco tratado. “Este estudio aborda con minuciosidad una de las principales cuestiones del sistema democrático actual. El título es acertado, porque vincula democracia, justicia y autogobierno, que son elementos inseparables”, sostuvo.
Jorge Prats resaltó que el libro combina teoría y práctica, apoyado en la experiencia de Placencia como juez de la Suprema Corte. “El juez debe estar protegido por una esfera de independencia razonable y preparado tanto en conocimientos como en virtudes éticas”. También propuso que los jueces en formación cuenten con mentoría de jueces experimentados durante su paso por la Escuela Judicial.
La obra, además, hace referencia a la necesidad de fortalecer la independencia judicial frente a tendencias de politización, citando ejemplos como el caso del Consejo General del Poder Judicial en España. “El poder judicial es uno de los más relevantes del Estado: anula las arbitrariedades, las ilegalidades y los abusos del poder mismo”, enfatizó Jorge Prats.
Robert Placencia Álvarez, autor del libro expresó que la obra nace como resultado de su preocupación por las quejas recibidas de jueces sobre traslados irregulares y afectaciones a sus derechos fundamentales. “Me motivaron los testimonios de jueces que iban a mi despacho, que mandaban notas, que decían que les desconocían sus derechos. Eso me llevó a investigar primero en sistemas europeos como los de España, Italia y Francia, y luego en algunos modelos latinoamericanos”, explicó Plasencia.
Sobre el modelo judicial dominicano, el autor expuso que, “la independencia del Poder Judicial ha sido un tema clave en el debate sobre su transformación”, y explicó los alcances de las reformas constitucionales de 1994 y 2010. Señaló que aunque estas reformas procuraron el fortalecimiento del sistema judicial, la práctica ha evidenciado desviaciones: “En vez de garantizar la independencia del juez, el ejercicio de competencias del Consejo del Poder Judicial se ha encaminado por un sendero diferente, lo que ha afectado derechos de jueces mediante traslados irregulares y obstáculos en los ascensos”.
En ese contexto, destacó la postura del magistrado Samuel Arias como voto disidente ante decisiones sin motivación: “una decisión que afecta derechos sin justificación es una decisión arbitraria”, afirmó el autor, al tiempo que advirtió que estas prácticas han generado descontento y renuncias en el sistema.
El autor consideró que la crítica bien fundada debe servir como herramienta de diagnóstico y transformación. “Como aprendí de mi hermano médico, para resolver el problema de un enfermo se necesita un diagnóstico preciso y sincero. Si no, estará perdido. Así ocurre con el sistema judicial”.
Placencia concluyó su intervención insistiendo en la necesidad de fortalecer la institucionalidad judicial y garantizar la independencia funcional de los jueces. “El juez debe ejercer sus funciones libre de presiones, tanto internas como externas. Y para eso, se necesita una carrera sólida, un sistema de garantías y una ética judicial bien definida. Solo así podremos hablar de un verdadero Estado de Derecho”.
La obra fue bien recibida por la comunidad académica y jurídica, quienes destacaron su valor como insumo para abrir debates profundos y formular propuestas que fortalezcan la justicia en República Dominicana.
