Santo Domingo, RD.- El Decanato de Postgrado de la Pontificia Universidad Católica Madre y Maestra (PUCMM) inauguró la Segunda Jornada de la Investigación de Postgrado, una iniciativa que busca fortalecer la cultura investigativa y consolidar una comunidad académica activa entre los estudiantes de programas de maestría y doctorado. La jornada tiene lugar desde este martes 21 al jueves 22 de mayo.
Durante tres días, se estarán presentando 30 ponencias desarrolladas por estudiantes activos o recién egresados, lo que representa un notable crecimiento respecto a la edición anterior. “El año pasado dimos nuestros primeros pasos con 10 ponencias presentadas por estudiantes regresados. Hoy celebramos con orgullo un crecimiento notable, hemos recibido 30 ponencias”, destacó la doctora Orissell Medina, decana de Postgrado.
El evento incluye, además, talleres especializados, conferencias magistrales y sesiones temáticas en diversas áreas del conocimiento como Historia del Caribe, Estudios en Español, Ciencias Económicas y Administrativas, Jurídicas, Ingeniería y Ciencias de la Salud.

“Esta jornada representa un puente entre nuestros campus, uniendo a estudiantes y académicos en un espacio común de diálogo y descubrimiento”, afirmó Medina, quien también valoró la importancia de este encuentro como un espacio para intercambiar conocimientos y fomentar la colaboración interdisciplinaria.
Las actividades iniciaron este martes en el campus de Santo Domingo y culminarán el jueves en el campus de Santiago. “Espero que estos días estén llenos de fructíferos intercambios, que fomenten la colaboración interdisciplinaria y que nos inspiren a seguir avanzando en la búsqueda del saber”, expresó la decana.
Al presentar su conferencia, “Selección aleatoria: Una idea radical para un mundo mejor”, el doctor Luis Garrido expuso cómo este mecanismo puede reducir los conflictos de interés y ampliar la representación ciudadana, transformando la manera en que se toman decisiones públicas y fortalecer la democracia.
El investigador explicó que la selección aleatoria es un proceso que consiste en que cada participante tenga la misma probabilidad de ser seleccionado. Esto no implica escoger sin criterio, sino que requiere establecer barreras mínimas o de excelencia que filtren a los candidatos antes del sorteo. “La idea es que tengamos un grupo suficientemente grande y diverso de candidatos que hayan pasado una barrera, y a partir de ahí, se eligen aleatoriamente”.

Sin embargo, el conferencista también señaló los límites de este modelo en contextos donde el gobierno controla el proceso. “Quien decide el tema que se va a hablar es el gobierno, y también si se implementa o no lo que decide la asamblea. Eso puede convertir el ejercicio en algo vacío”, advirtió.
Luis Garrido fue enfático al cuestionar los problemas estructurales de las democracias basadas en elecciones. “La democracia electoral tiene conflictos de interés que no tienen solución. El político toma decisiones pensando si le conviene para mantenerse en el poder”.
En ese sentido, criticó la práctica de modificar la Constitución para habilitar reelecciones en República Dominicana. En el 2002, durante el gobierno de Hipólito Mejía se modificó la Constitución, a pesar de pertenecer a un partido (el Revolucionario Dominicano) que históricamente se había opuesto a cualquier presión a favor de la reelección.
Luego, en 2010, Leonel Fernández se reelige y, tras lograr ese segundo mandato, su gobierno reforma nuevamente la Constitución para impedir la reelección del siguiente presidente. Sin embargo, también aprovecha para habilitarse a sí mismo, eliminando la cláusula del “nunca jamás” que había sido introducida durante el mandato de Hipólito Mejía.
“Luego viene Danilo Medina, que en 2015 no podía reelegirse debido a la reforma impulsada por el gobierno de Leonel. Sin embargo, su partido cambia la Constitución para permitir una nueva reelección, y Danilo logra presentarse para un segundo mandato. Más adelante, entre 2018 y 2019, se enfrenta a un fuerte rechazo popular e incluso a presiones internacionales, para no modificar la Constitución. Pero ese es el punto: nadie parece poder resistirse a ese poder. El que llega ahí (Presidencia) es como en la película El Señor de los Anillos: quien toma el anillo, no tiene chance de resistirse.”
El investigador también destacó que “en 2003, el gobierno tenía unos 200 mil empleados. Hoy, vamos por 600 mil”. Y agregó que el 66% de los dominicanos cree que un familiar en un cargo político debe, “ayudar a los suyos”.
Garrido advirtió sobre el impacto de la desinformación en los procesos electorales, especialmente en países con bajo nivel educativo como República Dominicana. “Eso es grave para nosotros. La desinformación es un arma que se utiliza en los procesos de elección, y nos afecta más por nuestro bajo nivel educativo”.

Citando datos del Caribe en 2022, reveló que el país lidera en reportes de intentos de compra de votos. “En la pregunta sobre si te ofrecieron dinero para votar, República Dominicana está en primer lugar con un 36%”, detalló.
Sobre la falta de representatividad en el sistema electoral, argumentó que el poder se concentra en grupos familiares. “Estamos viendo un relevo generacional, con hijos de expresidentes y legisladores ocupando cargos. Lo que tenemos es una visión homogénea que se transmite de generación en generación”, aseguró.
Para concluir, Garrido invitó a reflexionar sobre la posibilidad de aplicar la selección aleatoria en la administración pública. “¿Qué tal si nosotros pensamos en qué pasaría si hacemos elección aleatoria para cada uno? Eso es lo que yo quisiera que pensáramos”, planteó.
Aunque reconoció que no es una práctica común a nivel global, insistió en que podría ser una vía para contrarrestar la corrupción y el clientelismo: “El índice de corrupción nos coloca en la posición 104 de 180 países, con una puntuación de 36. Eso nos dice que estamos muy mal”.
En el acto inaugural estuvieron presentes el profesor Julio Ferreira, vicerrector Académico, y la doctora Virginia Flores, vicerrectora de Investigación e Innovación, junto a estudiantes, docentes y coordinadores de programas de postgrado.
