Santo Domingo, R.D.- La Escuela de Derecho de la Pontificia Universidad Católica Madre y Maestra (PUCMM) reconoció al docente Rosario Antonio Arache como parte de la iniciativa “Docentes de Valor”, que honra a educadores que han dejado una huella significativa en la formación de generaciones de abogados. Este homenaje resaltó la dedicación, excelencia y compromiso del profesor Arache, quien ha contribuido durante más de tres décadas a la enseñanza del Derecho en la universidad, impactando la vida académica y profesional de los estudiantes.
El doctor Héctor Alies, director de la Escuela de Derecho, expresó que este tipo de actividades son especialmente significativas para la comunidad académica. “Estas son actividades que nos llenan de orgullo porque se trata de reconocer a los nuestros, de rendir homenaje a un profesor queridísimo por los estudiantes, por sus colegas y por los egresados. Graduarse en Derecho en la PUCMM sin haber pasado por las aulas del profesor Arache es casi imposible”, destacó Alies.
El director resaltó además las cualidades humanas del docente, a quien definió como una persona cercana, humilde y comprometida, que ha dejado una profunda huella tanto en las aulas como en la vida de quienes han sido sus alumnos. “Hoy celebramos su trayectoria, pero también su calidad humana. Este reconocimiento tiene un valor especial porque se realiza en vida, junto a su familia, colegas y estudiantes que lo aprecian profundamente”.

Como parte del reconocimiento, se realizó un panel de testimonios en el que participaron el abogado Pedro Montilla, Prida Suero y Rony Peña, quienes compartieron experiencias y anécdotas que destacaron la trayectoria, calidad humana y aportes académicos del profesor Arache. El panel fue moderado por el profesor Lucas Guzmán, quien destacó la reciprocidad del afecto y respeto que Arache ha cultivado entre sus estudiantes.
“Profesor Arache, toda esta muestra de cariño es porque usted lo da. Esta tarde habrá risas, recuerdos y momentos emotivos, porque su paso por las aulas ha dejado huellas imborrables”, expresó Guzmán. Asimismo, lo describió como un profesor histórico y legendario dentro de la PUCMM.
El profesor Guzmán agregó que el cariño mostrado hacia Arache es reflejo de su entrega y calidad humana. “Profesor Arache, toda esta muestra de afecto es porque usted lo da. Usted es un profesor histórico, legendario en la PUCMM. Representa lo que somos: excelencia y cercanía”, manifestó.
El profesor Pedro Montilla resaltó el valor de la práctica, la trascendencia humana y la conexión pedagógica que caracterizan al homenajeado. “Arache combinó la trascendencia humana con el ámbito pedagógico. Nos enseñó el valor de las competencias y de entender el mundo al que íbamos”, señaló Montilla.
El catedrático compartió además una anécdota de su experiencia como estudiante, cuando el profesor Arache lo envió a realizar prácticas en la defensa pública, episodio que describió como una vivencia determinante en su desarrollo profesional. “Fue una experiencia impactante y enriquecedora. Pero más allá de lo académico, Arache era el profesor que te llamaba por tu nombre, que se interesaba por ti y te hacía sentir parte de un proceso de aprendizaje humano y cercano”, expresó.
Montilla recordó también el vínculo profesional y de amistad que ha mantenido con su maestro a lo largo de los años, destacando la influencia permanente de su ejemplo. “Se convirtió en un colega de consulta obligada, siempre dispuesto a orientar y compartir su experiencia. Años después tuve el honor de ser profesor de su hijo, lo cual fue una experiencia maravillosa que me permitió devolver un poco de lo que recibí de él. Reboso de gratitud, maestro, por lo que nos dio y por la oportunidad de hacerlo público”.

La abogada Prida Suero aprovechó la ocasión para resaltar las cualidades del profesor Rosario Arache, a quien describió como una persona apasionada, humilde y comprometida con la docencia. “Si hay una persona que me infundió pasión por el derecho, por la enseñanza y por la vida académica, fue Rosario Arache. Nunca tuve una clase aburrida con él; su entusiasmo hacía que uno amara el derecho y quisiera emularlo como fiscal o litigante”, señaló.
Asimismo, destacó la empatía y humildad del profesor, cualidades que según dijo le permitían conectar profundamente con sus estudiantes. “Arache conocía y leía al estudiante sin tener que hablar con él. Era ese hombro de apoyo siempre presto y dispuesto, capaz de entender las inquietudes y pasiones de cada alumno”.
En su intervención, también valoró el compromiso del docente con la enseñanza y la ética profesional, cualidades que inspiraron su propia vocación académica. “El compromiso se renueva a medida que el reto es mayor, porque eso te dignifica. Y eso lo aprendí de Arache”, comentó.

El egresado Rony Peña expresó su satisfacción al participar en el reconocimiento al profesor Rosario Arache, a quien definió como un ejemplo de la calidad docente que caracteriza a la PUCMM. “Es un orgullo para nosotros, los estudiantes y egresados, contar con profesores del nivel y la calidad del profesor Arache, porque en esta universidad aprendemos las buenas prácticas del derecho en la República Dominicana”, destacó.
Peña señaló que ser alumno del profesor Arache ha sido una experiencia enriquecedora tanto en lo académico como en lo personal, ya que de él aprendió dos grandes lecciones: la importancia de la calidad humana y de la responsabilidad. Recordó haber cursado con él las materias Derecho de Personas y Familia y Sociología Jurídica, donde pudo apreciar su capacidad para hacer sentir a cada estudiante valorado. Resaltó también el trato humano del docente, quien mantiene una relación cercana con los estudiantes dentro y fuera del aula. “Es admirable cómo recuerda los nombres de sus alumnos y cómo brinda seguimiento y apoyo constante. Eso demuestra su compromiso genuino con la formación y el bienestar de sus estudiantes”, afirmó Peña.

Al recibir su insignia institucional y el reconocimiento otorgado por la universidad, el profesor Rosario Antonio Arache expresó su profundo agradecimiento y emoción por el gesto.
Arache compartió que su rol como docente lo ha asumido con el corazón, lo que incluso ha sido comprendido y apoyado por sus hijas, a quienes pidió permiso desde temprano para entregarse plenamente a la enseñanza. Explicó que la universidad le ha otorgado una “paternidad afectiva”, forjada a través de los lazos humanos con sus estudiantes, algo que ha enriquecido profundamente su vida.
Durante sus palabras, recordó con cariño al profesor Héctor Alíes, a quien consideró una figura importante en su trayectoria. Narró cómo ambos compartieron experiencias durante sus visitas académicas a los centros penitenciarios, cuando Arache impartía la asignatura de Práctica Forense, destacando la colaboración y disposición de Alíes en esos momentos.
Conmovido, el profesor relató que en varias ocasiones pensó en dejar la docencia, pero cada vez que entraba a un aula, experimentaba una renovación interior. “A veces llego con deseos de renunciar, pero al entrar al salón siento como si me aplicaran una vitamina; se me quita el cansancio y vuelvo a sentirme vivo”.
El homenaje al profesor Arache simbolizó no solo el respeto y la admiración institucional, sino también el reconocimiento de generaciones de estudiantes y colegas que han sido inspirados por su ejemplo, su entrega y su compromiso con la educación.





